14 de septiembre de 2014

Los recuerdos no me alcanzan


Promesas de una extraña


13 de septiembre de 2014


10 de agosto de 2014

No tengo ganas de seguir, pero tampoco tengo ganas de parar. Tendría que pensar que me está pasando, pero es que estoy cansado de pensar

Esto también pasará...


Hubo una vez un rey que dijo a los sabios de la corte:
- Me estoy fabricando un precioso anillo. He conseguido uno de los mejores diamantes posibles. Quiero guardar oculto dentro del anillo algún mensaje que pueda ayudarme en momentos de desesperación total, y que ayude a mis herederos, y a los herederos de mis herederos, para siempre. Tiene que ser un mensaje pequeño, de manera que quepa debajo del diamante del anillo.
Todos quienes escucharon eran sabios, grandes eruditos; podrían haber escrito grandes tratados, pero darle un mensaje de no más de dos o tres palabras que le pudieran ayudar en momentos de desesperación total...
Pensaron, buscaron en sus libros, pero no podían encontrar nada.El rey tenía un anciano sirviente que también había sido sirviente de su padre. La madre del rey murió pronto y este sirviente cuidó de él, por tanto, lo trataba como si fuera de la familia. El rey sentía un inmenso respeto por el anciano, de modo que también lo consultó. Y éste le dijo:
-No soy un sabio, ni un erudito, ni un académico, pero conozco el mensaje. Durante mi larga vida en palacio, me he encontrado con todo tipo de gente, y en una ocasión me encontré con un místico. Era invitado de tu padre y yo estuve a su servicio. Cuando se iba, como gesto de agradecimiento, me dio este mensaje –el anciano lo escribió en un diminuto papel, lo dobló y se lo dio al rey-. Pero no lo leas –le dijo- manténlo escondido en el anillo. Abrelo sólo cuando todo lo demás haya fracasado, cuando no encuentres salida a la situación-
Ese momento no tardó en llegar. El país fue invadido y el rey perdió el reino. Estaba huyendo en su caballo para salvar la vida y sus enemigos lo perseguían. Estaba solo y los perseguidores eran numerosos. Llegó a un lugar donde el camino se acababa, no había salida: enfrente había un precipicio y un profundo valle; caer por él sería el fin. Y no podía volver porque el enemigo le cerraba el camino. Ya podía escuchar el trotar de los caballos. No podía seguir hacia delante y no había ningún otro camino...
De repente, se acordó del anillo. Lo abrió, sacó el papel y allí encontró un pequeño mensaje tremendamente valioso:
Simplemente decía “ESTO TAMBIEN PASARA”.

Mientras leía “esto también pasará” sintió que se cernía sobre él un gran silencio. Los enemigos que le perseguían debían haberse perdido en el bosque, o debían haberse equivocado de camino, pero lo cierto es que poco a poco dejó de escuchar el trote de los caballos.
El rey se sentía profundamente agradecido al sirviente y al místico desconocido. Aquellas palabras habían resultado milagrosas. Dobló el papel, volvió a ponerlo en el anillo, reunió a sus ejércitos y reconquistó el reino. Y el día que entraba de nuevo victorioso en la capital hubo una gran celebración con música, bailes... y él se sentía muy orgulloso de sí mismo.
El anciano estaba a su lado en el carro y le dijo:
-Este momento también es adecuado: vuelve a mirar el mensaje.
-¿Qué quieres decir? –preguntó el rey-. Ahora estoy victorioso, la gente celebra mi vuelta, no estoy desesperado, no me encuentro en una situación sin salida.
-Escucha –dijo el anciano-: este mensaje no es sólo para situaciones desesperadas; también es para situaciones placenteras. No es sólo para cuando estás derrotado; también es para cuando te sientes victorioso. No es sólo para cuando eres el último; también es para cuando eres el primero.
El rey abrió el anillo y leyó el mensaje: “Esto también pasará”, y n
uevamente sintió la misma paz, el mismo silencio, en medio de la muchedumbre que celebraba y bailaba, pero el orgullo, el ego, había desaparecido. El rey pudo terminar de comprender el mensaje. Se había iluminado.
Entonces el anciano le dijo:
-Recuerda que todo pasa. Ninguna cosa ni ninguna emoción son permanentes. Como el día y la noche, hay momentos de alegría y momentos de tristeza. Acéptalos como parte de la dualidad de la naturaleza porque son la naturaleza misma de las cosas.

18 de julio de 2014


no quiero volver a hablar 
de princesas que buscan 
tipos que coleccionar.

17 de julio de 2014


No soy quien soy si no te tengo 
Creo en las manos de Dios 
Y no en este absurdo dolor 

Mirar el mar ya no sirve, 

no me da la calma, 
Vivo del último beso que guardo en el alma 

Nunca sabrás lo que duele tu nombre 
No pierdo la fe y te sigo esperando 
Y esta soledad que me sigue abrazando 
Se queda aquí, no se quiere ir 
Y no se qué hacer ni qué decir, 
Amor aquí sin ti, no sé, no sé vivir,

17 de marzo de 2014

Mi cabeza tiene departamentos que no se comunican entre si....





"La gente emocionalmente perturbada no tiene esperanzas mientras ella misma no realice ningún esfuerzo por cambiar. Porque todo cambio, virtualmente por definición, requiere un esfuerzo, y por lo general el esfuerzo requiere une meta, una idea, un concepto. El concepto, en consecuencia, de que las cosas pueden ser mejores de lo que son- de que es posible modificarlas- constituye la escencia de todo cambio.
Aplicado a un pariente, amigo, allegado neurótico con el cual se debe estar en constante contacto, esto significa que si abrigamos el concepto de que es posible que cambie, si abrigamos la idea de que no está trastornado sin remedio, probablemente hayamos recorrido la mitad del camino hacia el objetivo de ayudarlo y vivir satisfactoriamente con él..."

Mi voz, tu inseguridad.-

Creo que...














                                                                                                                                                                                                                o capaz ya no.

2 de febrero de 2014

Noah: ¿Te quedarías conmigo? 

Allie: ¿Quedarme contigo? ¿Para qué? Míranos, ya estamos peleando. 

Noah: Pues, eso es lo que hacemos. Peleamos. Tú me dices cuando soy un hijo de puta arrogante y yo te digo cuando eres una pesada insoportable. Lo cual eres 99% del tiempo. No me importa insultarte. Me lo devuelves al instante, y regresas a hacer la misma cagada. 

Allie: Entonces, ¿qué? 

Noah: Así que no será fácil, será difícil. Y tendremos que echarle ganas cada día, pero quiero hacerlo, porque te quiero. Quiero todo de ti, para siempre, tú y yo, cada día. ¿Harás algo por mí? ¿Por favor? Imagina tu vida. 30 años de hoy, 40 años de hoy, ¿cómo se ve? Si es ese tipo, pues, vete. Vete. Te perdí una vez, creo que lo podría hacer de nuevo si supiera que es lo que realmente quieres. Pero no tomes el camino más fácil. 

Allie: ¿Cuál? No hay manera fácil, no importa lo que haga, alguien se lastima. 

Noah: Deja de pensar en lo que quiere todo mundo. Deja de pensar en lo que quiero yo, en lo que quiere él, o lo que quieren tus padres. ¿Qué quieres tú? ¿Qué quieres tú? 

Allie: No es tan sencillo. 

Noah: ¿Qué quieres? 

Allie: No es tan... 

Noah: Carajo, ¿qué quieres? 

Allie: Tengo que irme. 




Toda semejanza con la realidad es solo coincidencia.....................

.-

Has amado alguna vez a alguien hasta llegar a sentir que ya no existes? 
Hasta el punto en el que ya no te importa lo que pase? 
Hasta el punto en el que estar con él ya es suficiente, 
cuando te mira y tu corazón se detiene por un instante? Yo sí... 

30 de enero de 2014

Dia Feliz

NO me sueltes nunca mas!

28 de enero de 2014

Si supieras que nunca he estado en Londres....

...volverías de Tokio. 

Es la historia de una chica que le escribe cartas a su ex, cartas que no tiene intencion de mandarle, mails en los que nunca llega a tener fuerzas suficientes para apretar enviar. Y a lo largo de esos correos va diciendole todo aquello que se quedo en ella guardado, lo que quiso decirle y no encontro la manera, le cuenta la vida que esta teniendo ahora, se inventa otra vida con la que se sentiria mejor y tambien se la cuenta... en fin, me gusto mucho este libro y tiene millones de frases para el recuerdo.


"Cuando se acabó, cuando repartimos lo de cada uno, me tocó quedarme conmigo y eso es algo que aún no he querido perdonarte."

"El caso es que una vez que empiezas a esperar, si lo estás haciendo bien, llega un momento en el que dejas de saber a que estás esperando. (...) Es raro cuando esperas. No hay nada más peligroso que una persona que espera. Te puedes volver adicta a ese estado de incertidumbre y cogerle miedo a lo concreto."

"Una vez conocí a un chico que llevaba diez años esperando. Decía que estaba muy tranquilo, que todo ese tiempo había seguido con su vida, pero que no había pasado ni un solo minuto sin que se preguntara: ¿cuándo?"

"A menudo no logro comprender cómo soy capaz de vivir un día y otro y otro. Son las noches, no hay otra explicación. Algo tiene que pasar mientras duermo para que cada mañana se me olvide que no quiero nada de esto."

"Hacía millones y millones medios días que no estaba así de sola y no sé si eso es un gran logro o el principio de una nueva etapa que no me atrevo a celebrar. Brindemos."

"Y Madrid era Madrid y estaba lleno de gente pero yo era yo y estaba sola y empecé a echar de menos alguna que otra cosa. Reírme. Reírme. Hay que ver lo buena que es la risa."

"Quizás había disfrutado del proceso. Primero desear algo. Luego creer que se puede. Luego poner algún que otro medio. Mover un pie. Otro. Ver de cerca los síes. Eso gusta, cuando los síes comienzan a aparecer. Me encantaba tropezar con ellos. La alegría que tenía no era la alegría de llegar a algún lado, sino la alegría de creer que estaba llegando. Eso sí que era bonito."

"Tendrá un chorrito de amor del bueno, del que nunca llega, y un chorrito de amor del de verdad, el que consiste en encontrar a alguien que soporte lo que soy cuando me pierdo."


















                                            yo, en lo personal...me pierdo demasiadas veces..

Soy mi propio miedo

Hablan de sentir vacíos adentro como si fuera el lugar sin productos en la góndola del supermercado.

No hablo de esa clase de vacio en el que escasea algo, que lo llenas colocando ese "algo" en su lugar. Entonces no, no sabes lo que es sentir un vacío por dentro. Podemos mentirnos y así sentir que lo vamos llenando de a poco, pero es como cuando queres engañar al estomago y te tomas una sopa o dos vasos fríos de agua antes de la comida, momentaneamente te sirve, pero a la larga tenes hambre igual. Es ese sentimiento que te pone los ojos vidriosos, no ojos que brillan por amor, ese brillo que quiere mostar que todo el tiempo estás a un paso de llorar, aunque casi no llores, aunque estes sonriendo. He mejorado con el tiempo, hasta me lo creí un poco, creí que era una etapa. Pero mi mirada no miente, mi mirada siempre dijo mas que mi sonrisa, es tranparente y no me deja mentirme, no se maquilla con cosméticos; es lo que es, soy lo que ves.
Me pierdo todo el tiempo, trato de buscar muy adentro nuevamente que soy y que es lo que quiero. Me mareo con lo que esta bien o mal. ¿Bien o mal para quien? ¿Para vos, para mi, o para los demás?-. Me termino contestando que si no esta bien para vos, no esta bueno para mi tampoco. Y no, así no es. Por eso estoy como estoy, por andar comparando, por no despegarme del todo, por nunca terminar de llevar a cabo lo que en un momento me propuse hacer. Hoy siento que no puedo nada, totalmente frustrante. 
Siempre me resuena en la cabeza esta frase de una película: La vida continúa. No te da tregua. No espera a que levantes cabeza. Yo se que es así, la inicitiva la tengo, siempre me costo concretar. Dar el último (y el primer paso). La vida no va a esperar (no me espero) a que se vayan estos cucos que me habitan en el alma. Pero ese no es el problema, el problema soy yo, siempre lo fui, yo y mis delirios, mi cabeza hecha un limbo, el miedo que me da ser yo misma todo el tiempo, siento que no basta que me tengo que inventar a alguien mas para hacerlo bien.  Algo adentro me dice que no, que no sea yo, que no se serlo o que nunca lo fui y voy por ahí tropezando con todo porque no se quien carajo soy.  Nos vamos poniendo grandes y los trenes se van pasando y tengo miedo (de mi) y por mi.